Tecnología que aporta bienestar y sabor en reducción de azúcar

La innovación aplicada en materia de alimentos ha permitido que la industria se desarrolle y ofrezca cada vez mejores productos a los consumidores que buscan tener una alimentación más equilibrada, pero que también demandan experiencias en sabor.

A seis años de la promulgación de la Ley de Composición Nutricional de los Alimentos y su Publicidad (Ley 20.606), más conocida como Ley de Etiquetado, los expertos han hecho un positivo balance en cuanto a la simplificación de la información nutricional que permite que las personas sepan qué alimentos preferir, para tener una alimentación saludable.

Esta legislación marca un hito en cómo se concibe la alimentación de los chilenos, en la manera en que se informa respecto de los nutrientes que contienen los productos y en el rol de la empresa como un agente clave en los desafíos que plantea la industria.

En esta línea, la investigación y desarrollo aparece como un aliado fundamental en el logro de metas cada vez más desafiantes, en la reducción de nutrientes críticos como el sodio, la grasa y el azúcar. En el caso de esta última, las tecnologías que se han venido desarrollando tienen como foco disminuir la cantidad que se agrega a los alimentos para hacerlos más saludables, pero manteniendo el dulzor, que es un atributo relevante.

Innovación en Tecnología

El azúcar no sólo aporta dulzor, sino además una serie de propiedades funcionales y tecnológicas. Si se piensa en reducción de calorías, sin duda la eliminación o reducción de azúcar es el principal factor, aunque no se deben olvidar los carbohidratos y grasas presentes en los alimentos. Por ello no sólo se hace necesario que un producto no contenga azúcar y que cuente con el mismo dulzor, sino que además sea reducido en grasas y carbohidratos, manteniendo o incluso mejorando, el producto original.

Desde hace varios años, Floramatic cuenta con la línea FloraSweet, la que contempla combinaciones sinérgicas de edulcorantes intensivos para distintas aplicaciones con costo optimizado.

Con una distinta tecnología, se encuentra TastePrint, que son soluciones integradas de edulcorantes, no nutritivos con o sin tecnologías de sabor patentado y que permiten afinar componentes de sabor como dulzura inicial, sensación en boca y enmascaramiento de amargura.

Por otro lado, dentro de la plataforma de los productos ModulaSense de Firmenich, representada por Floramatic en Chile, está Sweetness Enhancers, que son sabores capaces de aportar y resaltar las notas dulces. Esto se logra, gracias a un complejo que actúa sobre la percepción cruzada entre acidez-dulzor presentes, elevando las sensaciones y permanencia en boca de este atributo, con enmascaramiento de notas amargas. Esta solución entregará una etiqueta limpia, dependiendo de la naturaleza del componente que aporta el dulzor, dado a que es compatible con azúcar, Stevia, Sucralosa y con cualquier otro edulcorante intensivo, o no intensivo.

La tecnología de la línea TasteGem potencia el sabor dulce y redondea los perfiles de dulzor y tonalidad de los componentes específicos encontrados en las distintas formulaciones con Sucralosa y/o Sacarosa. Para ello se recomiendan los productos TasteGem SL, para el reemplazo parcial de Sucralosa y TasteGem SG para el reemplazo parcial de sacarosa.

Dentro de la misma plataforma, la línea Tastegem SW es una tecnología más avanzada y específica que aporta sabor dulce con status natural, logrando con esto una etiqueta limpia. Dentro de esta línea destaca Tastegem SWL, producto patentado, que modifica el dulzor con acción sobre la lactosa presente y pudiendo reducir el azúcar hasta en un 40%, en productos lácteos.

“El equipo de ingenieros de Floramatic realiza un completo análisis para definir la elección de la tecnología más apropiada para cada producto, dosis de uso, cálculos de reducción de costos y etiquetado. Siempre, enfocado en el objetivo de desarrollar un producto saludable, con etiqueta limpia y sin sellos” explica Claudia Silva, Business Unit Manager de Floramatic.

Respecto a las ventajas, estas tecnologías y dependiendo de la aplicación, se pueden combinar, lo que permite elevar la experiencia sensorial y sorprender positivamente con los resultados en el producto final, lo que a su vez es clave en la elección que realizan los consumidores. Además, su uso genera ahorro en costos de formulación dado que gracias al aumento de la percepción del dulzor es posible reducir la cantidad de otros edulcorantes y también manejar las fluctuaciones en el precio del azúcar. Adicionalmente, se reducen calorías, se limpian las etiquetas y se logra un perfil sensorial muy similar al del azúcar, para todos los alimentos.

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